Tipos de Cocinas industriales en hostelería
A la hora de elegir el tipo de cocina que se va a instalar en un restaurante, bar, hotel, comedor… no existe una única opción ideal.
Hay varios tipos de cocinas profesionales que se pueden usar en hostelería: cocinas a gas, cocinas eléctricas, vitrocerámica o inducción son los más habituales. Cuál de ellas elegir depende también de distintos factores y su peso concreto en cada caso en particular: potencia, fuente de energía, higiene, precio, consumo, tipo de platos o utensilios de cocina…
Uno de los tipos de cocina más versátiles, por su adaptabilidad y pocas limitaciones es el de la cocina industrial eléctrica.
Cómo son las cocinas eléctricas industriales en el ámbito profesional
Las cocinas eléctricas profesionales destacan por comodidad a la hora de limpiar debido a sus formas lisas, a su sencillez a la hora de ajustar la temperatura y a ser una opción económica que se puede usar con ollas, sartenes cazuelas o pucheros de todo tipo de materiales sin restricción.
Las cocinas industriales eléctricas son aquellas que funcionan mediante una termorresistencia. Aunque existen otros tipos de cocinas que utilizan otros principios eléctricos (como las cocinas de inducción), cuando hablamos de cocinas eléctricas industriales nos referimos a las cocinas eléctricas con placas de resistencias independientes.
Estas placas cuentan con selectores de distintas posiciones, para poder regular su potencia y consumo. A diferencia de la regulación de la llama continua de las cocinas de gas, estas posiciones son fijas, con lo que es más fácil calcular el calor que producen y los tiempos de cocinado.
La alimentación más habitual en las cocinas eléctricas industriales es la trifásica con neutro, de entre 380 y 400V para poder alcanzar una mayor potencia, aunque existen las cocinas eléctricas profesionales que funcionan con corriente monofásica de 230 V.
Principales ventajas de las cocinas eléctricas industriales
Las características más destacadas que hacen de la cocina eléctrica una opción adecuada para muchos bares, comedores, hoteles, restaurantes u otros locales de hostelería son los siguientes:
Fácil Limpieza: sus formas lisas y no tener piezas móviles o aperturas hacen que su limpieza sea más rápida y sencilla, pudiendo limpiar rápidamente sin peligro de las manchas resecas.
Control de temperatura sencillo: Con distintas posiciones de intensidad fijas, su calentamiento es siempre el mismo en cada uso, pudiendo calcular la temperatura y los tiempos de cocinado con exactitud en las elaboraciones posteriores.
Material de los utensilios: se pueden usar recipientes de barro, aluminio o cobre. No es necesario que esté hecha de materiales ferromagnéticos, como ocurre en las de inducción.
Acometida eléctrica: para las cocinas que no dispongan de suministro de gas o no pueda usarse por normativa o seguridad. Las cocinas eléctricas profesionales se pueden instalar en todas las cocinas, especialmente si se dispone de instalación trifásica.
Seguridad: entraña menos riesgos que una cocina de gas, como los escapes, incendios o quemaduras.
Relación calidad/precio: las cocinas son más económicas que otros tipos de cocinas profesionales.
Gama de Cocinas eléctricas industriales Kore 700
En Fagor Professional hemos diseñado las cocinas eléctricas de la gama Kore 700 para ofrecer la solución más competitiva en el ámbito profesional.
Nuestras cocinas eléctricas industriales cuentan con 2, 4 o 6 placas de calentamiento, Con forma circular, se ajusta a la forma de los utensilios de cocina y facilita la limpieza por no tener bordes de difícil acceso.
Su selector de potencia de 7 posiciones proporciona un control preciso de la temperatura para distintos tipos de elaboraciones.
Están construidas en acero inoxidable, logrando así un equipo robusto y duradero, y con cantos redondeados para evitar que los líquidos penetren en su interior.
Las cocinas eléctricas industriales Kore 700 se pueden adaptar a las necesidades de cualquier cocina profesional de hostelería como bar, restaurante, residencias, hoteles o colegios.